jueves, 19 de noviembre de 2009


DIABETES

La diabetes es un desorden del metabolismo, el proceso que convierte el alimento que ingerimos en energía. La insulina es el factor más importante en este proceso. Durante la digestión se descomponen los alimentos para crear glucosa, la mayor fuente de combustible para el cuerpo. Esta glucosa pasa a la sangre, donde la insulina le permite entrar en las células. (La insulina es una hormona segregada por el páncreas, una glándula grande que se encuentra detrás del estómago).
En personas con diabetes, una de dos componentes de este sistema falla:
el páncreas no produce, o produce poca insulina (Tipo I); or
las células del cuerpo no responden a la insulina que se produce (Tipo II).
TIPOS DE DIABETES
Hay dos tipos principales de diabetes. Al tipo I, dependiente de la insulina, a veces se le llama diabetes juvenil, porque normalmente comienxa durante la infancia (aunque también puede ocurrir en adultos). Como el cuerpo no produce insulina, personas con diabetes del tipo I deben inyectarse insulina para poder vivir. Menos del 10% de los afectados por la diabetes padecen el tipo I.
En el tipo II, que surge en adultos, el cuerpo sí produce insulina, pero, o bien, no produce suficiente, o no puede aprovechar la que produce. La insulina no puede escoltar a la glucosa al interior de las células. El tipo II suele occurrir principalmente en personas a partir de los cuarenta años de edad.
DIETA PARA LOS DIABETICOS

La dieta apropiada para el control de la diabetes tendrá como objetivos conseguir unos niveles normales de azúcar en la sangre y un peso normal (reducir el peso si es elevado y aumentarlo cuando este disminuido).
Cuando hay obesidad es fundamental perder peso hasta llegar a los niveles recomendados según la edad, la talla y el sexo, aunque incluso una pérdida de peso de 4 o 5 kilos suele disminuir la resistencia a la insulina.
La dieta, junto a la insulina y el ejercicio son los tres pilares fundamentales del tratamiento de la diabetes.
El tratamiento dietético en la diabetes debe seguir las normas de la dieta equilibrada donde entren las proteínas, las grasas y los hidratos de carbono en su adecuada proporción: los hidratos de carbono deben aportar el 55-60% de las calorías, las proteínas el 15% y las grasas el 25-30%.
En cuanto al numero total de calorías estas dependerán del metabolismo basal de cada persona, que se calcula en función del sexo, la edad, el peso y la talla, y de su actividad física.- A veces solamente con el seguimiento de una dieta adecuada se puede controlar el nivel de azúcar en la sangre, otras veces es necesario recurrir a los llamados hipoglucemiantes orales y otras es necesario inyectar insulina. En este último caso sobre todo, deben comer a la misma hora todos los días para adaptar la ingesta de alimento a las dosis de insulina.
- El diabético debe evitar o reducir lo más que pueda los alimentos que le aporten azucares simples ( monosacáridos y disacáridos ) y preferir aquellos que aporten azucares complejos ( polisacáridos).
Son fuente de azucares simples el azúcar y los productos elaborados con esta como bollería, dulces, pasteles, tocino de cielo, flan, etc.
Son fuente de azucares complejos el pan, las harinas, las patatas, los cereales, el arroz, las legumbres, etc.
De ellos el pan y las patatas tienen un mayor índice glucémico, es decir el azúcar que conbtienen se absorbe con mayor rapidez que la de alimentos como las legumbres o los frutos secos.- También debe evitar el consumo de alcohol ya que este disminuye los niveles de azúcar en la sangre.
- Se evitarán los alimentos ricos en grasas saturadas los cuales deben sustituirse por alimentos desgrasados o con grasas no saturadas.
- Se elegirán alimentos ricos en fibra ya que ayudan a controlar el nivel de azúcar en su sangre. Entre estos alimentos se encuentran las frutas frescas (no en zumo) y las verduras, los panes integrales, las legumbres y los cereales que contienen salvado (integrales).